viernes, 2 de marzo de 2012

De vuelta a Nunca Jamás


Escondido en un baúl se oxidaba el viejo catalejo que un día nos acercó el paraíso aquél lleno de piratas, sirenas y niños perdidos a las ventanas de nuestra habitación, cuando un revolotear de polvo de hadas acarició de nuevo nuestras mejillas con la magia de ese lugar, haciendo que la casualidad nos volviera a cruzar.


Alba Expósito

No hay comentarios:

Publicar un comentario